• Lee cuidadosamente el anuncio de la oferta de empleo, el cual generalmente te dirá algo sobre los intereses del empleador.
• El conocimiento que tengas sobre el negocio de un eventual empleador, su dimensión, productos, servicios, o algún evento noticioso reciente, siempre impresionan al entrevistador y te brindan confianza.
• Revisa artículos sobre la empresa en diarios y revistas.
• Realiza una lista con preguntas sobre la empresa y el puesto. De esta manera, demuestras tu interés e iniciativa.
• No hagas preguntas sobre beneficios o del sueldo durante la primera entrevista.
Prepárate para las preguntas de la entrevista:
• Practica las respuestas de la entrevista con tus amistades o parientes, pero no intentes memorizarlas. Para lograr una entrevista exitosa, es fundamental actuar con naturalidad.
• Prepárate, ya que serás quien esté hablando la mayor parte del tiempo. El entrevistador querrá ver si sabes expresarte eficazmente, y cuan informada/o estás sobre la empresa/industria.
• Si has tomado un tiempo para pensar en cómo podrías generar valor, podrás contestar las preguntas sin problemas, mientras propones ejemplos relevantes dirigidos a sus necesidades específicas.
• Avisa con tiempo a tus referencias que vas a ir a una entrevista. Cuéntales de la empresa y del puesto al que estás postulando.
• Muchas veces la decisión de contratar se toma en los primeros 30 segundos. Da una buena primera impresión. Debes llegar un par de minutos antes, revisar tu apariencia y ser agradable en la recepción.
Actúa correctamente durante la entrevista:
• Saber escuchar y tener confianza son aspectos claves para una entrevista exitosa. Los empleadores quieren verte entusiasta e informada/o sobre la compañía. También es una oportunidad para que evalúes a la compañía. ¿Quieres trabajar ahí? ¿Puedes contribuir, aprender nuevas habilidades o tener la oportunidad de avanzar? ¿Se te abrirán puertas con este puesto?
• Una sonrisa, un fuerte apretón de manos, una conducta confiada, amistosa y entusiasta, todo esto puede contribuir positivamente para generar una primera buena impresión de ti.
El lenguaje corporal:
• Tu lenguaje corporal puede expresar más sobre tu personalidad de lo que dices. Adopta una postura erguida. Nada peor que andar encorvado, ya que refleja flojera, indecisión, y falta de profesionalismo. Evita todo tipo de movimientos nerviosos con tus manos o pies. Sonríe. Los empleadores siempre prefieren un candidato alegre y entusiasta que a una persona aparentemente hostil o estresada. Sin embargo, trata de no excederte. Las sonrisas falsas y el humor forzado tampoco son recomendables.
• Tómate tu tiempo. Las respuestas precisas y lógicas que abarcan hechos relevantes son más efectivas que las respuestas demasiado largas.
Asegúrate de haber escuchado bien la pregunta y que has entendido. Está bien pedir aclaraciones. Contesta lo que se pregunta.
• Realiza algunas de las preguntas que preparaste previamente.
La última pregunta podría ser aquella sobre la fecha probable en la que tomarán una decisión.
Agradece, vuelve a expresar tu interés por trabajar con ellos, y sal del lugar. En un momento apropiado, pídele a uno de los entrevistadores que te de una tarjeta de presentación.
• Vístete formal.
• Preséntate, no esperes a que otra persona dé el primer paso.
• Saluda con un fuerte apretón de manos, con confianza y profesionalismo.
• Demuestra tu energía y entusiasmo por el puesto.
• Escucha atentamente al entrevistador.
• Toma contacto visual.
• Contesta las preguntas cuidadosamente y honestamente.
• Cuando sea necesario, tómate tu tiempo para pensar en la respuesta.
• Agradece al entrevistador por haber tomado el tiempo de entrevistarte y deja la oficina con un apretón de manos y una sonrisa.
• Consulta si puedes llamar en un par de días.